Fomentando la autoestima y la rehabilitación
- Rehabilitación y reinserción en la vida cotidiana son los objetivos de la Unidad de Terapia Ocupacional del Hospital Dr. Gustavo Fricke, la cual atiende cerca de 500 pacientes nuevos cada año.
Pacientes de Viña del Mar y de la Red del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota se rehabilitan en la Unidad de Terapia Ocupacional del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Dr. Gustavo Fricke. Son pacientes adultos que se han visto afectados por patologías traumáticas, quemaduras y otras lesiones que han afectado la funcionalidad del movimiento de sus extremidades superiores y necesitan reinsertarse en la vida cotidiana.
El año 2014 ingresaron al programa 427 personas nuevas, realizándose cerca de 7 mil sesiones de terapia en el período y 32 mil procedimientos. Claudia Carrió, Terapeuta Ocupacional explica que en la unidad se trabaja “la funcionalidad del paciente y estamos enfocados a que ellos vuelvan a tener la autonomía que han perdido en algún momento de su vida, ya sea por accidente o por alguna lesión importante, que puedan o no quedar con secuela, ellos necesitan volver a esa autonomía que perdieron. Ahí está el rol de la terapia ocupacional”.
Reinserción y autoestima
Claudia Carrió comenta que “el porcentaje de rehabilitación de los pacientes es bastante alto. Muchos de ellos quedan con secuelas, pero la mayoría de las secuelas no son importantes y los llevan a tener un buen desarrollo dentro de su vida diaria”. Gracias a esta rehabilitación “la mayoría logra volver a sus lugares de trabajo y si no es así, a lugares de trabajo adaptados a sus nuevas necesidades”.
Es el caso de Sergio Urbina (65 años) quien sufrió una patología traumática compleja “el 23 de septiembre, más o menos, me corté los dedos con un serrucho eléctrico, estuve 1 mes hospitalizado para ver si podían recuperarme los dedos, y a dios gracias si me los están recuperando. Voy bien. Yo llego acá en la mañana, se hacen distintos pasos, uno mete las manos un rato al agua, después a la parafina y una vez que se saca la parafina, la terapeuta y empieza a hacer los ejercicios de los dedos”.
Axel Saavedra (25 años, estudiante de ingeniería agrícola) explica que vivió una situación similar al sufrir un accidente jugando fútbol: “Cuando me quebré el brazo, yo lo pasé mal, estuve como traumado. Acá mismo me han ido rehabilitando psicológicamente, porque acá te tratan de incluir a la sociedad. Y esa ha sido mi experiencia acá, muy buena”.
Eugenio Espinoza, (68 años, chofer de transporte interurbano) lleva 2 años de rehabilitación luego de tener un accidente en la palma de la mano “con una sierra eléctrica. Me hizo estar 25 días hospitalizados, luego una rehabilitación en terapia ocupacional donde estoy desde el 10 de junio de 2013. La verdad es que en terapia ocupacional he visto maravillas. No tengo queja alguna contra el hospital, me han tratado muy bien”.
Motivar a los pacientes es fundamental en su rehabilitación, debido a que de esa forma se le da sentido a la terapia. “Nosotros acá aparte de los ejercicios, aparte de la movilización que puedan hacer, trabajamos todo lo que son las ergoterapias, donde nuestros pacientes hacen trabajos con propósitos en el fondo. Trabajan sus manos en alguna actividad que los motiva”, indica Claudia Carrió.
Además de los ejercicios, la rehabilitación se orienta a fortalecer el autoestima de los pacientes, quienes producto de su dolencia ingresan “bastante angustiados, son en el fondo seres humanos que han perdido su capacidad de desenvolverse en sus actividades como lo hacían con anterioridad. Entonces, si no logramos recuperar esa parte, podemos lograr recuperar el movimiento. La frase “no puedo” no existe. Ellos tienen que saber que depende 100% de ellos su recuperación y que ellos saben que si lo pueden hacer, lo van a lograr”, indica la profesional.