Escuela Intrahospitalaria Canec: un desafío de salud integral en el nuevo hospital
• Escuela intrahospitalaria tiene su lugar en la primera etapa del nuevo hospital, para seguir mejorando la calidad de vida de los pacientes entre 4 y 18 años que estudian.
Fundada hace casi 20 años, la escuela intrahospitalaria Canec del Hospital Dr. Gustavo Fricke es la primera de su tipo en la región. Con 40 alumnos matriculados, la escuela tiene entre sus alumnos tanto a aquellos que asisten cotidianamente a su sala de clases, como a pacientes de atención domiciliaria, – del Programa Naneas (Niños y adolescentes con Necesidades Especiales de Atención de Salud) y la Unidad de Siquiatría Infantil -, y a niños y jóvenes hospitalizados.
La escuela tiene un lugar en la segunda etapa del nuevo Hospital Fricke, pero debido a su enorme aporte a la calidad de vida de los pacientes, se instalará en la primera etapa de la obra con capacidad en sala, de 24 niños. Así lo explica María José Olivares, profesional de Puesta en Marcha: “se ubicará en el 3er piso como una adecuación funcional, es decir que de manera momentánea funciona en la primera etapa del nuevo hospital, y cuando se levante la segunda etapa, se trasladará. Cuenta con oficinas para secretaria, jefa de Unidad Técnica Pedagógica (UTP), director y sostenedor. También considera una cocina – taller para los niños, que es una cocina eléctrica para preparaciones esporádicas de acuerdo a ciertos objetivos pedagógicos. Y por supuesto incluye bodegas, servicios higiénicos adaptados y un mobiliario dinámico y colorido de acuerdo a las necesidades pre escolar y escolar una sala de estudio y zona de computación”. Se suma también un patio adaptado para que los alumnos puedan, también desarrollar actividades lúdicas al aire libre. Asimismo, la escuela está ubicada estratégicamente frente a los ascensores y escalas de evacuación, y cuenta con su propio plan de seguridad y emergencia, al igual que todos los recintos del hospital.
Mejorando la calidad de vida de los pacientes
Pedro Cepeda, Director de la actual escuela intrahospitalaria y con más de 10 años de experiencia, no oculta su satisfacción por lo que considera un reconocimiento a la labor educativa. “Si bien somos una entidad que prestamos colaboración al hospital, sobre todo en los tratamientos médicos de niños en situación de enfermedad entre los 4 y los 18 años, es decir de prekinder a 4º medio, afirma, nos alegramos mucho cuando vino el arquitecto y nos mencionó que estaba considerado el espacio de la escuela dentro del proyecto nuevo, e incluso nos mostró la maqueta. Ahora podemos ver que se concretó la idea y estamos bien contentos porque tenemos el espacio para seguir trabajando en lo que hemos hecho ya casi por 20 años, dentro del hospital”.
Respecto a cómo funcionará la escuela, al menos físicamente dentro de su recinto en el nuevo hospital, el Director explica que “esto es como una escuela, pero también es como una casa. Estamos bien contentos, porque así ampliamos nuestra labor como docentes dentro del contexto hospitalario. La idea es integrarnos con los equipos médicos para trabajar transdisciplinariamente, es decir, fusionar distintas disciplinas para abordar fenómenos complejos como, por ejemplo, un niño con una enfermedad siquiátrica o un niño postrado. Esto te permite mirar los fenómenos desde distintos puntos de vista y tener mejores herramientas para dar soluciones concretas a esa familia en ese momento específico. En el fondo, a lo que apuntamos es a mejorar la calidad de vida de las personas; como profesores, ayudamos a que se desarrolle en las personas el máximo de sus potencialidades, y el concepto de salud también tiene que ver con eso”, afirma el docente.